Te has preguntado ¿qué tan importante es la amistad en tu vida? ¿Mucho? ¿Poco? Para algunos los es todo y esos son los que protagonizan Friendship, una sincera, emotiva y melancólica película sobre eso que nos motiva y vale la pena guardar por el resto de nuestras vidas: la verdadera amistad.

Un grupo de amigos en sus 30's se reuna para organizar la fiesta de reencuentro de su promoción de colegio. En medio de los preparativos, Singha (Jatrin Wattanasin) recuerda su último año de escuela junto a la pandilla... y también a su primer amor.

La película se traslada unos 20 años atrás (1983), al último año de colegio, cuando un adolescente Signha (Mario Maurer) se enamora de la chica nueva de la clase, Mituna (Apinya Sakuljaroensuk), en medio de las aventuras y desventuras que conlleva el hacerse adulto.

A juzgar por el poster o el trailer Friendship podría parecer una comedia romántica con happy ending, una crónica de los días de colegio con aire nostálgico. Y hasta cierto punto lo es. Sin embargo, el director Chatchai Naksuriya se las arregla para componer un film con muchos momentos intensos y logra entrelaza géneros de forma creíble, como la vida misma.

Y más que la historia de una amistad, la película habla del valor de la misma, de que tan importante es para nosotros, sobre todo en la época de colegio, cuando sentamos la base de lo que haremos más adelante y cómo a partir de un lazo de amistad nace algo más fuerte: el amor.

A partir de un muy buen guión, Naksuriya se las ingenia para mostrar de refilón varios aspectos de la sociedad, como los hogares rotos o la violencia de las calles. Pero lo que en realidad divierte y enamora son los pasajes que cuentan las guarradas que hacían los personajes en su época de colegio, ese sentimiento de camaradería y los sucesos que los harían inseparables. Y, por supuesto, la enternecedora historia de amor de Signha y Mituna que, apesar de lo que se podría uno imaginar, termina de forma muy inesperada... incluso trágica.

Muy buenas actuaciones, bastante naturales y se siente la química entre los protagonistas, no sólo en la pareja, sino también en los amigos, los adolescentes y sus versiones adultas. El único aspecto que no convence tanto es el soundtrack, que mete canciones donde podría haber funcionado mejor el silencio o una melodía diferente. Sin embargo, el resultado final sigue siendo sobresaliente.

Friendship es un drama cargado de nostalgia, pero también de grandes recuerdos y divertidos momentos... sinceros, algunos quizá más trágicos de lo que cabría esperar ¡pero bueno! ¿La vida es así no? No siempre hay happy endings... y quizá eso la hace aún mejor. Muy, pero muy recomendable.